Nuestra Señora de Guadalupe

Nuestra Señora de Guadalupe es la advocación mariana surgida de las apariciones de la Virgen María al indígena Juan Diego en el cerro del Tepeyac, México, del 9 al 12 de diciembre de 1531. María se presentó como la "Madre del verdadero Dios por quien se vive", pidiendo la construcción de un templo para mostrar su amor y compasión a todos los pueblos que habitaban la tierra.

El milagro culminó el 12 de diciembre cuando la Virgen imprimió su imagen en la tilma de Juan Diego, creando una "pintura" imposible de reproducir humanamente que perdura incorrupta después de casi 500 años. La imagen contiene un mensaje teológico profundo con símbolos que los indígenas podían leer: está embarazada (cinta morada), es más poderosa que sus dioses (eclipsa al sol), pero es humana y maternal. Guadalupe provocó la conversión masiva de América: 8 millones de indígenas se bautizaron en los siete años siguientes.

Las apariciones guadalupanas ocurrieron apenas 10 años después de la conquista de México (1521), en el momento más crítico del encuentro entre dos mundos. Los pueblos indígenas habían perdido sus templos, sus dioses y su estructura social, mientras que la evangelización inicial encontraba resistencias comprensibles en una cultura traumatizada.

El Tepeyac había sido lugar sagrado dedicado a Tonantzin, "nuestra madrecita", diosa mexica de la fertilidad. La Virgen eligió estratégicamente este lugar para presentarse como la verdadera Madre, superior a los dioses antiguos pero comprensiva con las necesidades humanas. Su mensaje sintetizó genialmente elementos cristianos e indígenas, logrando la inculturación perfecta del Evangelio. El resultado fue la transformación religiosa más rápida y profunda de la historia: América se convirtió en continente mariano.

El 12 de diciembre de 1531 se produjo el milagro definitivo: la Virgen imprimió su imagen en la tilma de Juan Diego como prueba para el obispo Zumárraga. Ese día se construyó la primera ermita guadalupana y comenzó oficialmente el culto que transformaría América. La fecha marca el nacimiento de la devoción guadalupana.

Fue declarada Patrona de México en 1737, de América Latina en 1910 y de las Américas en 1999. Su santuario es el segundo más visitado del mundo católico después del Vaticano. La fecha del 12 de diciembre, en pleno Adviento, es providencial: Guadalupe prepara la Navidad mostrando a María embarazada del Salvador. Su festividad une a toda América en una sola fe mariana, siendo la advocación que más ha influido en la historia del continente.